Las 12 cosas que jamás tienes que hacerle a un gato. Cuando menos si deseas llevarte bien con él. Por favor, no use sus manos o pies para divertirse con él. No le arrojes el juguete, tíralo en una trayectoria distanciada del gato a fin de que logre capturarlo. No lo eduques con golpes o chillidos. ¿Mas cosas?
Si algo caracteriza a los gatos es su carácter peculiar y interesante. Los felinos son indudablemente animales independientes que acostumbran a buscar la soledad a lo largo del día. Esta soledad se acentúa en los mayores, que tienen un mayor nivel de autonomía, en tanto que no precisan depender del resto para sentirse seguros. Además de esto, la curiosidad y el instinto cazador forman parte primordial de su forma de ser, hecho que los hace bien difíciles de domesticar muchas veces.
No hay duda de que el hombre, si bien realice sacrificios inútiles, es inútil de mudar el carácter de estos animales, pero lo que sí puede llevar a cabo es adoptar algunas medidas de protección para eludir que los gatos se escapen de casa o se transformen en señorita . Desde Animalados te garantizamos diez consejos para eludir que esto ocurra:
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Jamás dejes de llevar a tu gato al veterinario
Cerciórate de llevar a tu gato al veterinario para sus revisiones periódicas. Si lo realiza, puede advertir un inconveniente, como una visión achicada, antes que se transforme en un inconveniente grave. Por lo menos, lleve a su gato a un examen de forma anual.
Géneros de veneno o substancias tóxicas
En la mayor parte de las situaciones, estas lamentables intoxicaciones en gatos acostumbran a darse en casa y el primordial fundamento es que nos encontramos rodeados de artículos químicos de empleo períodico, como lejía, jabones, champús, alimentos e inclusive plantas que poseen enzimas tóxicas que nuestro gato no es con la capacidad de metabolizar. Estos son solo ciertos ejemplos de intoxicaciones de prominente peligro:
- Artículos de limpieza que poseen lejía y cloro.
- Alimentos como pasas, uvas, chocolate u otros dulces que contengan cafeína.
- Insecticidas o pesticidas con arsénico en su formulación.
- Plantas venenosas como el eucalipto, el maíz o el lino por contener cianuro.
- Fármacos como paracetamol, ácido acetilsalicílico o complejos vitamínicos que contengan vitaminas A y D.
- Jabones y limpiadores que contengan sosa corrosiva u otras substancias cáusticas.
- Picaduras de ciertos insectos, como los cantáridos.
- Aerosoles antiparasitarios.
¿Por qué razón mi gato tiene fiebre?
La verdad es que son bastantes los motivos por los cuales un gato tiene la posibilidad de tener fiebre, pero en la mayoría de los casos las causas de este malestar acostumbran a estar socias a infecciones provocadas por bacterias o parásitos, tal como a patologías virales o estados inflamatorios. Repasemos cada uno.
Ten en cuenta que la fiebre en los gatos es una manera de que el organismo se resguarde de esos estímulos negativos que tienen la posibilidad de ocasionar mayores daños a tu mascota, con lo que no es de extrañar que frente la existencia de ciertos organismos, la temperatura suba. como medida natural de protección.
¡Los gatos no comprenden de castigos!
En el momento en que un gato se porta mal, la primera cosa que se le sucede a su humano es castigarlo. Y más allá de que es esencial, corregir en el instante con una palabra clara como: “NO”, intentando de castigarlo aparte de apuntarle que lo que logró no está bien, no es buena técnica para adiestrar a un gato.
En verdad, se demostró que la mejor forma de corregir a un gato y enseñarle buenos hábitos es PREMIARLO en el momento en que se porta bien, o hace algo bien. Dale un premio o una gominola a fin de que asimile el buen accionar en el instante conveniente, y sé incesante.