¿En algún momento te has cuestionado si los gatos tienen la posibilidad de continuar una dieta vegetariana?
Bueno, la contestación fácil: los gatos no pueden ser vegetarianos de forma natural. Eso, sí, como en el caso de los humanos, bajo un control alimentario pueden llevar a cabo este tipo de dietas.
Todo y que los gatos son fundamentalmente carnívoros, hoy día podemos encontrar muchos alimentos vegetarianos para nuestras mascotas. Desde alimentos procesados (gránulos) hasta alimentos crudos. Existen dietas específicas a partir de proteínas animal procedientes de vegetales.
En este artículo te vamos a explicar por qué razón y qué le puede llevar a cabo esta clase de dieta a tu gato.
Comida vegetariana para gatos: ¿es correcta una dieta vegetal para ellos?
Los gatos son carnívoros rigurosos, lo que quiere decir que su dieta debe contener un porcentaje altísimo de carne.
Su constitución física lo revela, sus dientes están diseñados para desgarrar la carne y su tracto digestivo es cortísimo, en contraste a los herbívoros. En este último, como las verduras son mucho más bien difíciles de digerir y los nutrientes son mucho más bien difíciles de absorber, necesitan un desarrollo de digestión mucho más complejo y prolongado.
Además de esto, el gato precisa taurina, un aminoácido fundamental que no es con la capacidad de sintetizar por sí mismo, lo que ordena a consumirlo en su dieta para eludir graves faltas alimenticias.
El gato es un animal carnívoro puro
En el momento en que mencionamos que los gatos son carnívoros puros o carnívoros obligados, significa que, en su estado natural, los gatos son carnívoros por necesidad.
Y eso es por el hecho de que no tienen la posibilidad de conseguir todos y cada uno de los nutrientes precisos de las plantas y/o bacterias.
Entonces ¿por qué razón hay alimentos vegetarianos para gatos?
Actualmente hay una gran demanda de este género de producto. Una demanda que ha ido creciendo en los últimos años.
Estos productos no están hechos con elementos derivados de animales, pero se estima que dan todas y cada una de los nutrientes y proteinas que necesitan los gatos.
De cualquier manera, antes de dárselo a nuestra mascota, es muy aconsejable preguntar al veterinario, puesto que indudablemente deberemos usar suplementos y aditivos a fin de que no surjan inconvenientes.
Además de esto, cada 2-3 meses tienen que hacerse un análisis de sangre, en tanto que este animal no exhibe síntomas de patología hasta el momento en que tiende a ser bastante tarde, con lo que resulta conveniente repasarlo.